Al terminar mis oraciones
en recuerdo de mi amada…
salí y vi
tu cara enamorada…
Y aún llorando mis perdidas ilusiones…
vi en ti
el amor de tu mirada.
Vi en ti
un alma con luz bañada…
Vi un alma que dolida
y confundida
buscaba ser amada.
Al terminar mis oraciones…
Cuando mi ser vagaba en la nada
lleno de confusiones...
Sentí un tierno cantar.
Sentí que deseaba abrazar
a esa alma enamorada
que me estaba mirando…
suspirando
para ser amada.
Fue el cielo
que al ver mi desconsuelo
llenó de alegría
el alma mía…
para volver a sentir
para volver a vivir
la belleza de un nuevo día.
Humberto Silva Morelli
No hay comentarios:
Publicar un comentario